El desfiladero de Monrrebei o Congost de Mont Rebei, es un paraje que se localiza entre las provincias de Huesca y de Lérida (España), entre las comarcas de la Ribagorza y el Pallars Jussà. Se constituye en la parte más estrecha por la que el río Noguera Ribagorzana, que constituye la frontera natural entre Huesca y Lérida, atraviesa la sierra del Montsec, paredes en caída vertical de más de 500 metros y una anchura en su punto mínimo de veinte metros. La parte catalana forma parte de la Reserva Natural de la Noguera. Está dentro del Espacio de Interés Natural de la Sierra del Montsec.
Fue adquirido en 1999 por la Fundació Territori i Paisatge (actualmente conocida como la Fundació Catalunya-La Pedrera) con el objetivo de preservar sus valores naturales y de paisaje.1
Ocupa una extensión de 600 hectáreas y se trata de un paraje de indudable valor ecológico por su flora mediterránea y submediterránea, con especies endémicas y raras y la fauna salvaje que alberga, entre la que deben destacarse las rapaces (quebrantahuesos (Gypaetus barbatus), buitres (Gyps fulvus), Águila dorada (Aquila chrysaetos), etc., y por la belleza del paisaje agreste.
El hecho de que no se hayan podido construir carreteras para llegar a este paraje le convierte en uno de los pocos territorios vírgenes de la provincia. Han sido varios los intentos de crear un camino a lo largo del desfiladero. En 1912, se trató de excavar en la piedra para poder acceder a la herradura de la misma. Sin embargo, la necesidad de llevar agua a través del embalse de Canelles hizo que el agua tapara dicha senda. Posteriormente, en los años sesenta se realizó otro camino más elevado que tuvo que ser reconstruido en 1984 tras el recrecimiento de Canelles de 1977.
En 2013 se inauguraron las pasarelas de Monfalcó. Un camino natural que recorre el desfiladero por el pueblo abandonado de Huesca y cruza hasta La Masieta de Mont-Rebei en una ruta de unos 4 kilómetros, uniendo Aragón y Cataluña a través del desfiladero.2
Tiene gran atractivo para escaladores (excepto en los meses de diciembre a junio en que deben respetar la crianza de las aves que anidan en las paredes de piedra), espeleólogos que encuentran aquí alguna cueva como la Colomera, y amantes del senderismo, donde pueden practicarlo sin gran dificultad, disfrutando en general y en algunos tramos en particular, como es el caso de un tramo de camino semiesculpido en la roca, de un paisaje excepcional.
Se puede llegar desde las poblaciones de Monfalcó, San Esteban de la Sarga, Ager, Puente de Montañana y Tremp.
Llegamos a Benasque por la tarde/noche y por no subir a pistas pasamos la noche en un parking para autocaravanas del propio pueblo al lado del pabellón, se puede pernoctar sin problemas, pero fue un error ya que al día siguiente cuando subimos buscando sitios para tirarnos con los trineos estaba a rebosar y fue una odisea aparcar...recomiendo pasar la noche en el parking de las pistas para no encontrarte con este problema.
Una vez allí fue divertido, los niños siempre se lo pasan bien en la nieve con sus trineos....
A los pies de pista de Benasque...como me gusta mi AC
y mi mujer, por supuesto.....
Si vas a la nieve, no puede faltar el muñeco!!
y.....a divertirse !!!
que guay.....
Esa misma tarde emprendimos la vuelta, dormimos en el parking del Congost de Mont Rebei para amanecer alli y así a primera hora de la mañana iniciar la ruta por el desfiladero. Nos acompaño el Hanky al que le da miedo cruzar según que puentes..jajajaja
Que tranquilidad en la montaña y por la noche....
Vistas desde el comienzo de la ruta y parking....
Primer puente, no me acordaba que el perro pesaba tanto....ufff
Subiendo al punto mas alto donde comienza la bajada por las escaleras..mientras tanto el Hanky también aprovecho para darse un bañito.
Después de 13km y el sufrimiento de los puentes y los escalones..que bien sienta un poco de agua fresquita !!!