Después de varios meses preparando las que serían las vacaciones de este verano con nuestra casa rodante llego el día y por fin emprendemos camino hacia Escocia, un destino al que siempre he querido ir desde que vi la película Braveheart.
Todo surgió un día de barbacoa en familia, viendo que coincidíamos en las fechas de las vacaciones con mi hermana y cuñado que también tienen autocaravana y al que también le llamaba mucho la atención ese país, poco más se podía discutir, parece que se alineaban las astros y el destino estaba claro, Escocia y las Highlands….
Pues llego el día e iniciamos camino hacia Calais para coger el ferri que nos llevaría a Inglaterra, salimos solo los hombres y las mujeres se reunirían con nosotros en Liverpool, ellas van en avión ya que trabajaban hasta el viernes, de esta manera nosotros haríamos el camino con mas calma.
Mientras esperábamos visitamos Calais una ciudad de origen pesquero y que por su situación geográfica y estratégica es y fue una de las ciudades con mayor trafico de viajeros y asediada en varias ocasiones por Ingleses y Españoles durante las diferentes guerras.
Pues bien a la hora de coger el ferri nos encontramos que a la perra le faltaba una vacuna y no nos dejaron embarcar, tuvimos que separarnos, mi cuñado cogió el ferri tal y como estaba previsto y fue hacia Liverpool a recoger a las mujeres y nosotros tuvimos que quedarnos a ponerle la vacuna que le faltaba en Calais y esperar 24h.
Ya en Inglaterra cogimos la autopista y en vez de ir a Liverpool quedamos en Manchester para ver la ciudad, Manchester es una ciudad que gracias a su sistema de canales destaco por su industria textil convirtiéndose así en una de las ciudades mas importantes de Inglaterra.
Una vez visitada la ciudad de Manchester emprendimos camino a Glasgow. Glasgow esta situada en las tierras bajas escocesas y es la ciudad mas grande de Escocia, es considerada una ciudad cosmopolita y muy bulliciosa y destaca su catedral ya que fue la primera construida de piedra y por su universidad fundada en 1451.
Estando visitando la ciudad dio la casualidad que estaban grabando la película de Spiderman 3 y las calles parecían un escenario de Hollywood, eso si, no vimos a ningún actor.
De Glasgow emprendimos camino hacia Fort Willian, paramos pasar la noche alrededor de Loch lomond, el mayor lago de la isla de Gran Bretaña con una superficie de 71 km².
Camino a Fort Willian atravesaríamos el valle Glen Coa o "valle del llanto" uno de los mas bonitos de las tierras altas de Escocia y parte del Área Escénica Nacional del Ben Nevis, montaña mas alta del Reino Unido con una elevación de 1345 metros.
Dormimos en Glenfinnan para despertarnos cerca de una de las mayores atracciones turísticas de la zona o incluso de la isla, allí se encuentra el viaducto de Glenfinnan o mas conocido como el "puente de Harry Potter" que es por donde pasa el único tren a vapor que todavía circula y que aparece en sus películas.
Una vez que ha pasado el tren iniciamos camino a la Isla de Skye donde pasaremos algunos días visitándola. Justo unos kilómetros antes de atravesar el puente para adentrarnos en la isla visitamos el castillo de Elian Donan, fortaleza situada sobre una pequeña isla con el mismo nombre que por su situación solo era accesible en barco y por lo tanto en su día fue una fortaleza muy difícil de tomar.
La Isla de Skay donde pasamos varios días es la segunda isla mas grande de Escocia y la mitad de su población todavía habla gaélico, conserva una rica herencia de antiguos monumentos de la época de los clanes y esta formada por uno de los mas tortuosos terrenos del país con piscinas naturales llamadas Fairy pools o miradores como el The Fairy Glen, el Quiraing o las formaciones rocosas de The Old Man of Storr

Una vez visitada de pasada la ciudad y el lago, emprendimos camino hacia Aberdeen o "Ciudad de Granito", denominada así por sus edificios de piedra gris, su universidad es prueba de ello, es la tercera mas antigua de Escocia y la primera en obtener una Catedra en medicina. Su puerto por sus situación es uno de los mas concurridos de Europa y guarda su esencia en el barrio antiguo con sus casas antiguas casas de pescadores.
Seguimos bajando por la costa hacia St. Andrews que es una de las ciudades históricamente mas antiguas de Escocia, en ella se encuentra su catedral derruida, su castillo que también lo esta y una de las universidades mas importantes de Escocia, también es considerada la cuna del golf.
De camino hicimos parada para visitar el castilo de Dunnottar que comotantos otrs esta totalmente en ruinas.
Pues para mi llego el momento del viaje, nos dirigimos hacia el monumento de Willian Wallace, si este viaje estaba en nuestros pensamientos es porque desde que vi la película de Braveheart quería venir a Escocia y como no, visitar el monumento, la ciudad y el Castillo de Stirling.
Stirling fue la capital de Escocia y la historia de William Wallace y Stirling está marcada por la Batalla del Puente de Stirling (1297), donde Wallace lideró a los escoceses a la victoria contra un ejército inglés superior en número. Esta victoria lo catapultó como héroe nacional y Guardián de Escocia, aunque más tarde fue derrotado y ejecutado. La ciudad de Stirling, con su castillo estratégico, fue fundamental en las guerras de independencia, y hoy en día honra a Wallace con el monumento en Abbey Craig y puentes conmemorativos.
Pues ya llega el final del viaje por Escocia y acabamos en su capital, Edimburgo, patrimonio de la humanidad declarado por la UNESCO, es una ciudad repleta de historia y cultura, con una hermosa arquitectura con sus calles adoquinadas, sus misteriosos callejones, sus festivales de fama mundial como el Royal Edimburgh Military Tatto que no pudimos entrar ya que las entradas estaban agotadas desde hacia muchísimo tiempo. La visitamos en dos días, pasamos la noche allí para ver el Royal Mile por la noche a los pies del castillo, pasear por Grassmarket y visitar la Catedral de St Giles.













































